Monday, August 18, 2008

Y sin más reparos, se fue de casa tumbando la puerta, sin dar ninguna simple explicación, sin siquiera exponer una excusa.
Salgo por detrás en su búsqueda.
Y en la esquina la espera el diablo., Sólo miro.
El coludo se la lleva, se la roba como si fuera el mejor de los trofeos.
Doy media vuelta y me emborracho de la bondad de la lluvia.

2 comments:

Anonymous said...

Cuando el diablo es nuestro adversirio, no nos queda más remedio que bajar la cabeza, pero somos nosotros los que le damos ese nombre y esa apariencia y por lo tanto podemos echarlo abajo cuando queramos.

Anonymous said...

Qué triste, pero lindo, verdaderamente.

Hay cosas bastante buenas por acá.

Saludos.

En completo olvido el rincón, que de un tiempo a otro y con el avance de la tecnología ha ido al abismo de la decadencia. Me atrevería a tr...